Mi nuevo artículo para CNNE
A pesar de todo ¡seguimos “queriendonos” y cuidándonos! Y eso es bueno…
Por Mari Rodríguez Ichaso
Es un fenómeno muy interesante notar que a pesar de todos los retos y problemas que el Coronavirus ha traído a nuestras vidas -incluyendo el uso diario de mascarillas y tapabocas- el instinto vital de cuidar nuestros cuerpos se mantiene vivo. ¡Algo muy positivo en medio del caos!
Y especialmente el cuidar nuestra piel -ahora que usamos menos maquillaje, pues salimos menos- es una realidad que mujeres de todo el mundo enfrentan. ¿No les parece?
El uso de mascarillas ha creado en muchas el llamado en inglés “maskne” – una especie de acné producido por humedad, falta de exposición, alergias, residuos de grasa y hasta algunas bacterias. De ello que -con un teléfono inteligente y tiempo para chequear ventas por Internet- hemos comprado una gran cantidad productos de tratamiento de belleza en el 2020.
Por ejemplo, de acuerdo con Captify, una famosa compañía internacional, que produce estadísticas y estudios de mercado, la venta de “serums” o sueros faciales han subido un 90%. Y que también han subido considerablemente las búsquedas en Internet sobre productos de belleza -especialmente de humectantes y cremas hidratantes.
Yo veo esto como una buena reacción (por pequeña que sea) después de 10 meses en que nuestro estilo de vida cambio 180 grados y fue revolucionado de pies a cabeza. “Querernos” y tratar de mantener una imagen cuidada y lo mejor posible – es señal de excelente equilibrio y supervivencia.
Señal de haber recobrado la disciplina que muchas perdimos hace casi un año.
Y esta idea me encanta y me levanta muchísimo el animo – y es todo lo que necesitaba mi tendencia de consumidora empedernida. Y les comento que personalmente he comprado por Internet más cremas y lociones que nunca, he “revivido” mi casi olvidada rutina de belleza – y he encontrado que “quererme” y cuidarme, es una encantadora y exuberante sensación de bienestar ¡y así recibiré 2021 con más optimismo y al menos una piel renovada!
