Cuando llegamos al exilio mami echaba mucho de menos las muchas pinturas que teníamos en Cuba - y encontró en un Goodwill de muebles usados de Miami una copia (bastante buena y on un lindo marco) de este cuadro de una Nsturaleza Muerta de Cezanne!
Cuadro que se mudo con nosotros a Nueva York y adornó su comedor hasta que al morir mami y papi tuve que quitar la cada -y lo done (quizás no debía haberlo hecho) al Salvation Army!
Yo creo que mami se creía que -después de tantos años en la familia- era un Cezanne de verdad. Y nunca quiso botarlo, aunque algunas personas le pedían que lo hiciera porque era un poco “airport art” y muy cursi tener copias famosas en las paredes.
Pero para mami -y para mi- aquel cuadro que compramos por un dólar en el Goodwill-era un recordatorio de haber vencido y triunfado después de los primeros años de tristeza y pobreza al habernos convertido en “refugiados cubanos”. Era nuestro compañero de lucha y de haber deseado rodearnos de belleza y de arte aún en los momentos más difíciles.